viernes, 7 de agosto de 2009

SERPIENTE DE MAR (España-USA, 1984)

Director: Amando de Ossorio. Intérpretes: Timothy Bottoms (Pedro Fontán), Taryn Power (Margaret), Ray Milland (Profesor Timothy Wallace), Jared Martin, Gérard Tichy, Carole James, Jack Taylor (asesino), Víctor Israel, Miguel de Grandy, José Canalejas, Paul Benson, León Klimovsky (Doctor), Eduardo Bea, Teresa del Olmo, Alicia González. Duración: 88 minutos.

Síntomas: Debido a una explosión nuclear, una prehistórica serpiente de mar es despertada de su hibernación (vamos, o eso deducimos) para desatar el caos y el terror entre los marineros y demás parientes. Un pescador con problemas con la bebida y una pija americana son los únicos testigos del monstruo, pero nadie parece dispuesto a creerles. Es normal, recién vista la peli yo tampoco termino de dar crédito.

Diagnóstico: Considerada, con todo merecimiento, una de las más lamentables muestras del género fantástico español (lo cual ya tiene su mérito), Serpiente de mar ya tenía visos de ser una película maldita desde su misma gestación. Su director, Amando de Ossorio, en una entrevista realizada poco antes de su fallecimiento llegó a decir literalmente que ese film “le quitó la vida” y ciertamente no hablaba por hablar. Finalizando el rodaje, y debido a las innumerables dificultades que se produjeron durante el mismo, Ossorio sufrió un fuerte ataque al corazón que le retiró definitivamente de la dirección y mermó su salud de por vida. Y eso que todavía no había visto el resultado final.
El bueno de Amando echa toda la culpa al productor, José Frade (ese señor siempre tan sonriente que acompaña a Norma Duval en los últimos años), acusándole de engañarle con falsos argumentos y echando por tierra una producción que hubiera requerido bastante más capital del que parece ser que el productor madrileño invirtió. Os transcribo sus palabras de la entrevista publicada para el libro “Cine fantástico y de terror español: 1980-1983)” editado por la Semana de Cine Fantástico de San Sebastián:
“Me llamó José Frade y me preguntó por los proyectos que tenía. Él quería una película para Estados Unidos, y aceptaron el guión de Serpiente de mar. Ellos aportaron los actores protagonistas a cambio del mercado americano. (Frade) se quedó con Ray Milland, la hija de Tyrone Power, Timothy Bottoms… y les dio gato por liebre. Fue un desastre, porque ésta no era una película de cuatro semanas, aquí ya hacía falta una gran inversión en efectos especiales que no se hizo. Una porquería rodada en inglés hecha de cualquier manera(… )De esta película se pueden contar horrores. A mí me costó un disgusto, incluso físico”.

A tenor de lo dicho por su director podríamos deducir que nos encontramos ante un caso similar al de “The Giant Claw” (1957) esto es, una buena película de ciencia-ficción malograda por unos deficientes efectos especiales. Nada más lejos. No es justo que toda la culpa se le eche al poco presupuesto (visto los resultados debieron ser unas 500 pesetas de las de entonces) de sus efectos especiales. Para ser sinceros el guión es tan precario como los medios que se pusieron al alcance para su ejecución. Los personajes son prácticamente inexistentes, sus diálogos absolutamente bochornosos y plagados de tópicos y frases hechas del género, con reacciones cándidas e ingenuas en el mejor de los casos. Incluso existen personajes (caso del mafioso interpretado por Jack Taylor) que aparecen y desaparecen de la trama sin la menor explicación. Un guión que hoy no serviría ni para un aprobado raspado de un alumno de 1º de carrera. Citaré sólo un par de ejemplos:
Al comienzo de la película un barco pesquero encuentra toneladas de peces muertos. No saben si es debido a la contaminación, a la radioactividad, a un suicidio colectivo… El patrón del pesquero, para descubrirlo no tiene otra idea que la de cocinar uno de los peces y comérselo. Claro, cuando ve que el pez brilla en la oscuridad piensa que mejor no terminar la cena y arrojar el cargamento de nuevo al mar.
En otro momento, cuando los protagonistas se reúnen para decidir qué van a hacer con la bestia, al personaje de Milland no se le ocurre otra cosa que ir al puerto a robar unas bengalas “la intención es asustarle; no queremos dañar al animalito. Sólo una bondadosa acción disuasoria”, palabras textuales. ¿Acción disuasoria? ¿Para qué? ¿Quizá el animal entienda así que no debe molestar a los humanos y se meterá de nuevo en el agujero de dónde nunca debió salir? No lo llegamos a descubrir nunca. Ossorio se llevó el secreto a la tumba, porque al final de la película los personajes tampoco hacen mucho de lo que previamente planearon.

Hoy día, vista la película con el suficiente distanciamiento parece clara la jugada de Frade, un productor que de tonto no tiene un pelo. Leído el ridículo guión pensaría que al menos serviría de excusa para sacarles el reparto a los americanos, invertir el dinero que se merecía tan delirante proyecto (o sea apenas unas pesetillas) y embolsarse unos pingües beneficios.
La película puede tener sus simpatizantes (entre los que me encuentro) ya no sólo porque va directa al grano –la primera aparición del monstruo se produce a los cuatro minutos- sino por ese claro homenaje que supone a la serie b norteamericana de los años 50, con “El Monstruo de los Tiempos Remotos” (1953) a la cabeza, así como su acercamiento al Kaiju eiga japonés que se plasma especialmente en secuencias como la serpiente destrozando la maqueta del faro, que hasta puede resultar entrañable. Pero el diseño del monstruo (una especie de marioneta de calcetín con ojos saltones y aletas de papel de fumar) echa por tierra cualquier posibilidad de plantearse la película ni como una ingenua diversión. Prueba de que la película no se puede tomar en serio es que ni siquiera se establecieron acciones legales contra la banda sonora, un burdo calco de la maravillosa partitura de John Williams para “Jaws" (1975) .

Ossorio ha sido sin duda un director singular dentro del panorama fantástico español al que le debemos sobretodo su tetralogía de los Templarios y con ello la creación de uno de los pocos monstruos eminentemente patrios (no olvidemos que el Hombre-lobo de Naschy está presente en diversos culturas y no es de exclusividad hispana) pero por mucho que nos empeñemos en demonizar la cinta que hoy nos ocupa, los resultados de la misma tampoco difieren mucho de otros trabajos de su realizador: torpeza narrativa, tosca puesta en escena, deficientes efectos especiales… Si Ossorio hubiera demostrado cierta sabiduría hubiera escatimado las apariciones de la ridícula criatura minimizando sus jocosos efectos, por ejemplo. Tuve la oportunidad en su día de ver en cine el tráiler promocional y ya de por sí puedo asegurar que era bastante disuasorio incluso para un mozalbete como yo en aquellos años.

En cuanto a los actores, ¿qué decir salvo que están acorde con el resto del filme? Timothy Bottoms parece estar pensando todo el tiempo cómo ha llegado a filmar este tipo de pelis con el comienzo tan prometedor que tuvo, Taryn Power, espantosa, viendo como se esfuma su última oportunidad de hacer algo en esto del cine y sólo un deteriorado Ray Milland (esta fue su última aparición en pantalla) parece de vuelta de todo e incluso dispuesto a divertirse mientras tomaba el sol en Lisboa.

Cronología de un gazapo*:
*(El minutaje corresponde al e-link de abajo)
No nos cebaremos demasiado con la película y escogeremos sólo unos pocos momentos que pueden ilustrar muy bien los problemas que tuvieron que lidiar los responsables durante sus escasas semanas de rodaje:

00:18:50. Durante el juicio por negligencia a Pedro Fontán vemos que la mesa donde está Bottoms y su abogado defensor está compuesta por dos piezas separadas o por una sola más larga, según cambiamos de plano medio a plano general. Ossorio revela al respecto lo siguiente: “Un día de repente deciden que hay que acabar todas las sesiones de Bottoms, y tuve que resolver su participación en la escena del juicio en un día a golpe de fotomatón”. Esto además se hace especialmente patente por la pobre ambientación de la sala, compuesta por unos pequeños pupitres que apenas le llegan a las rodillas a los actores y les obligan a sentarse encogidos.
00:31:45. En la secuencia donde Pedro Fontán visita a la americana testigo del monstruo (el personaje interpretado por Powell) observamos cómo esta permanece en una habitación que parece de todo menos de hospital. También al respecto Ossorio declaró en su momento que el presupuesto era tan paupérrimo que tuvieron que simular un hospital en el hotel donde se alojaban y poner cartelitos aquí y allá tipo “Silencio” o “Quirófano”. 00:59:45. Seguimos con hospitales, donde un sobreviviente al ataque del monstruo permanece en estado catatónico (no es para menos una vez visto el teleñeco). Sin embargo vemos claramente como al aparecer el asesino interpretado por Jack Taylor el paciente mueve los ojos en repetidas ocasiones. A este respecto señalar también las dotes de deducción del doctor, interpretado por el entrañable director de cine León Klimovsky, que con sólo echar un vistazo posteriormente, acierta que el paciente ha sido asesinado y de qué modo, en la mejor tradición C.S.I.
Y así podríamos seguir y seguir ya que no he mencionado ni la mitad de fallos de racord, incongruencias y delirios varios que pululan por todo el metraje. Pocas veces una hora y media darán para tanto. Aunque, como siempre, recomiendo su visionado con buena compañía y una carga extra de buen humor. La vais a necesitar.

El ataque de la Bestia

No puede perdérsela: El acérrimo fan de las películas de bichos gigantes.
Abstenerse: El que esté dispuesto a tomársela en serio. No lo va a conseguir.
Cómo comprarla: Ahora mismo sólo se puede acceder en VHS, descatalogada, por supuesto. Urge una edición en DVD con material extra; daría para mucho.
E-Link: Serpiente de Mar (1984.DVD+VHS) Dual [Angeles-Caidos] by Bloodyask.avi

16 comentarios:

mavipas dijo...

ástico español" ya me he quedado sobrecogida. Los fallos de rácord son frecuentes en este tipo de producciones, pero es cierto que no parece un hospital ni con imaginación...

Caronte dijo...

Una de Amando de Ossorio...con bicho gigante y con León Klimovski!! Bajando!

"Horror" dijo...

Excelente reseña, muy interesante lo que contas sobre su productor y lo que le significo a el como director. Esta es una de las que me falta de Amando, por supuesto dentro de genero. Tendre que echarle una mirada, aunque ya me imagino como viene la mano luego de leer tu reseña, ja. Aunque si pude sobrevivir a La endemoniada, quizas esta no me afecte tanto, jaja.

Saludos!

Quimérico Inquilino dijo...

Mavipas: creo que se quedó a medias el mensaje XD pero vamos, sí, esta supera lo imaginable en comparación con otras.
Caronte: Si eres amante de Ossorio no puedes perderte su triste despedida del cine. Yo creo que a pesar de todo la disfrutarás comoyo.
Horror: Joer, "La endemoniada" es lo único que me falta ver en cuanto a fantástico de Ossorio, ya me gustaría verla, ya... Por otro lado, como momento, a decir verdad "Serpiente..." no es mucho peor que el resto de su filmografía aunque a mí me resulte toda muy simpática y disfrutable.

Saludos a los tres

Obliterator dijo...

Ohhh hay que ver lo diferentes que eran los diseños de monstruos de antaño, predominaban los ojos saltones y los rasgos inofensivos, se nota que se demoraban casi nada entre idear un monstruo y luego pasar al siguiente.

Esta es definitivamente la versión hispana de the giant claw ó Reptilicus.

Anónimo dijo...

Tan mala como entrañable. No recuerdo si la incluí en mi libro "372 FILMS DE CULTO"...

ATXEIN dijo...

A mi de esta siempre me rallò el como acababan con el pobre Millard..
Y si, la peli es bastante cutrecilla..una làstima siendo lo ùltimo de Ossorio..

Saludos¡¡

john mcclane dijo...

De Ossorio solo he visto la saga de los templarios. Esta por película por muy cutre que sea, me han dado ganas de verla.

Saludos.

Carlos Maciá dijo...

Yo una vez hice una marioneta igual, con un calcetin... pues eso.

Quimérico Inquilino dijo...

No seas modesto, Carlos. La tuya daba más miedo...

Dakko dijo...

Hola, gracias por pasarte por mi blog, con esto te devuelvo la visita.
La pelicula que comentas, bueno no la he visto, no es mi estilo como tu comprenderas.
Salu2, vuelve cuando quieras y yo tambien te enlazo.
Dakko.

Anónimo dijo...

A mí me gustan los bichos gigantes jajaja, me gustaría verla. Es una pena lo que le pasó al director, es bastante extraño.

Me gusta mucho tu blog porque entretiene mucho y por eso mismo, te he dedicado un award, mostrando mi aprecio (sección Artes). Espero te guste, muchas gracias por la dedicación y por dar a conocer las películas más frikis de las cuales he tenido conocimiento.

Muchos abrazos.

Robert García dijo...

Pues esta la tengo hace tiempo pendiente de ver, me han entrado ganas, gracias por la reseña, saludos

Quimérico Inquilino dijo...

Hola, Dakko gracias por devolverme la visita, estaremos en contacto ;)
Jazzz, muchas gracias, guapa! Mejor te visito en tu blog y te responda allí.
Nada, punk, no hay más excusas; esta de Ossorio tiene que caer ya.

Un saludo a todos

Rey Nova dijo...

Pendiente de ver este film. De Ossorio tengo aun incompleta la saga templaria y guardo en algún lugar "La noche de los brujos". Muy interesante articulo.

Españoladas y Olé dijo...

El gran Ossorio. Me invitó a su rodaje y lo pasé requetebien.
Cuando veía una película suya se lo comentaba y me respondía. "¿Y no me niegas el saludo?" Jajajaja Era único